El uso de Botellas de PET y vidrio El envasado de bebidas es un tema que ha generado mucha controversia. Este artículo ofrece una evaluación detallada de diferentes envases, analizando su respeto por el medio ambiente, su rentabilidad, su durabilidad y sus problemas de salud, entre otros factores. Esperamos ofrecer una perspectiva basada en la información sobre cada parámetro, de modo que los fabricantes puedan tomar decisiones inteligentes a la hora de envasar bebidas y, al mismo tiempo, informar a los consumidores sobre el mismo tema. Ya sea que el interés de uno resida en la sostenibilidad, en descubrir qué ahorra más dinero o en garantizar que las bebidas sean de buena calidad y seguras, este texto proporcionará un análisis equilibrado de los pros y los contras relacionados con el uso de plásticos como el tereftalato de polietileno en comparación con las botellas de vidrio para almacenar líquidos.
¿Cuáles son las principales diferencias entre las botellas de plástico y de vidrio?
Composición del material: plástico PET frente a vidrio
El tereftalato de polietileno, que es una forma de poliéster y un tipo de resina plástica, se utiliza para fabricar botellas de PET. Esto se hace combinando ácido tereftálico con etilenglicol en un proceso de polimerización. Es transparente, ligero y tiene una gran resistencia a la tracción. Por el contrario, la sílice (arena), el carbonato de sodio (carbonato de sodio) y la piedra caliza son los principales componentes de las botellas de vidrio. Estas materias primas se funden juntas a altas temperaturas durante la producción para crear materiales resistentes e impermeables. Aunque es más pesado que las botellas de plástico PET, las botellas de vidrio ofrecen una mejor protección contra el gas o el vapor, preservando así la calidad de la bebida de manera más eficaz.
Proceso de fabricación y consumo de energía
La fabricación de botellas de plástico PET pasa por varias etapas, que incluyen la polimerización con etilenglicol y ácido tereftálico, la extrusión y el moldeo por inyección para formar preformas. A continuación, estas se calientan y se soplan hasta obtener su forma final, como botellas, mediante moldeo por soplado y estirado. Aunque el consumo de energía durante la producción es alto, por lo general es menor que el de la fabricación de botellas de vidrio.
Para la producción de botellas de vidrio, las materias primas como sílice, carbonato de sodio y piedra caliza deben fundirse a temperaturas superiores a 1400 °C (2552 °F). Este proceso de alta temperatura consume mucha energía. Además, el vidrio fundido se puede soplar o prensar para darle la forma deseada a las botellas, que luego se recocen para eliminar las tensiones internas causadas por el moldeo. A pesar de sus grandes necesidades energéticas, algunos tipos de envases de vidrio se pueden reutilizar muchas veces, lo que reduce parte del costo energético de su ciclo de vida.
Peso y transporte: PET vs. vidrio
En el caso de una botella de 500 ml, las botellas de plástico PET son mucho más ligeras que las de vidrio y pesan, de media, unos 20 gramos frente a los 300 gramos de estas últimas. La diferencia de peso es tan significativa que ayuda a reducir significativamente los costes de transporte, ya que se pueden entregar muchas más piezas por viaje, ahorrando así el consumo de combustible y reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero. Además, el diseño ligero de las botellas de PET reduce las posibilidades de que se dañen durante el traslado de un lugar a otro, minimizando así las pérdidas y garantizando la seguridad del producto.
Sin embargo, las botellas de vidrio más pesadas brindan una mejor protección contra el intercambio de gases y vapores, lo cual es importante para preservar la calidad del contenido. No obstante, esta ventaja genera mayores costos de transporte y causa más daño ambiental debido al mayor consumo de combustible. Además, el volumen del vidrio, junto con su naturaleza frágil, requiere materiales de embalaje más resistentes, lo que aumenta aún más los gastos generales de transporte y complica la logística.
En resumen, si bien los plásticos PET y los vidrios tienen sus ventajas, cuando se trata de eficiencia durante el transporte y rentabilidad, nada supera al plástico, ya que no solo tiene menos masa sino que también se rompe fácilmente.
¿Cómo se comparan los impactos ambientales: plástico versus vidrio?
Huella de carbono de las botellas de plástico PET
A la hora de evaluar la huella de carbono de las botellas de plástico PET, es importante evaluar su ciclo de vida completo, es decir, desde que se producen hasta que se desechan. Las botellas de PET suelen tener menores emisiones de CO2 durante su creación que las de vidrio, ya que la energía utilizada en su fabricación es menor. Además, el proceso de producción del PET implica calentar juntos el etilenglicol y el ácido tereftálico para que puedan reaccionar y polimerizarse fácilmente, lo que ahorra energía en comparación con hacer que esos dos productos químicos reaccionen a las altas temperaturas necesarias para producir envases de vidrio.
Además, lo que ya se ha mencionado sobre las ventajas de transporte de las botellas de rPET se traduce directamente en una menor huella de carbono total. La razón de este hecho es que su ligereza permite transportarlas de forma más eficiente, lo que reduce el consumo de combustible por unidad transportada y, por lo tanto, provoca una menor contaminación por vertido.
El reciclaje también tiene un papel fundamental en lo que respecta a la huella de carbono que dejan estos tipos de envases. Las emisiones de gases de efecto invernadero se pueden reducir significativamente si se utilizan materiales reciclados, como alfombras, en lugar de otros nuevos fabricados a partir de materiales vírgenes. Aunque las tasas de reciclaje de PET en las distintas regiones varían enormemente, sería de gran ayuda intensificar los esfuerzos para mejorar las instalaciones de reciclaje, reduciendo así aún más el impacto ambiental.
En resumen, los plásticos PET suelen presentar niveles más bajos de gases de efecto invernadero que los materiales de vidrio, principalmente porque se fabrican utilizando menos energía durante los procesos de producción. Su menor peso conduce a una menor contaminación del transporte y al potencial de una reutilización eficaz además del reciclaje.
Reciclabilidad: vidrio vs plástico
Para comparar la reciclabilidad del vidrio y el plástico es necesario tener en cuenta los procesos de reciclado y la eficiencia. El vidrio se puede reciclar sin problemas y no pierde su calidad ni su pureza incluso después de varios reciclados. El reciclado del vidrio es un proceso sencillo en el que el vidrio usado se recoge, se lava, se tritura para convertirlo en vidrio molido, se funde y se transforma en nuevos productos. Sin embargo, puede haber tasas bajas de reciclado de vidrio debido a la contaminación, así como al coste que supone la recogida de materiales más pesados.
Por otro lado, los plásticos, especialmente los PET, son reciclables, pero normalmente se reciclan a menor precio. Esto implica que los plásticos reciclados se utilizan principalmente para fabricar artículos de menor calidad, como textiles o envases no alimentarios. El procedimiento incluye la recolección, la clasificación, la trituración, el lavado y la fusión del material para fabricar nuevos pellets. En lo que respecta al mantenimiento de la calidad en términos de material durante el reciclaje, el plástico PET no alcanza las características del vidrio, aunque esto se puede mejorar mediante avances tecnológicos en el sector, junto con una mayor concienciación sobre su reciclabilidad.
En resumen, es posible reciclar el vidrio una y otra vez sin sufrir daños, mientras que en la actualidad el plástico tiene un método de reciclaje más complejo que conduce a la producción de bienes de menor calidad. La mejora de las prácticas relacionadas con el reciclaje de estas dos sustancias puede dar lugar a resultados sostenibles.
Vertederos y gestión de residuos
La gestión eficaz de los residuos y el vertido de residuos son esenciales para reducir el daño ambiental y fomentar la sostenibilidad. La EPA afirma que los vertederos actuales tienen revestimientos de protección y sistemas de lixiviación que evitan la contaminación del suelo y el agua. Además, se han puesto en marcha medidas para atrapar el metano producido a través de los sistemas de recolección de gas para que pueda utilizarse como combustible.
Sin embargo, a pesar de las mejoras, los vertederos siguen teniendo muchos problemas. En condiciones anaeróbicas, los materiales orgánicos se pudren y producen gases como el metano, que es un potente agente de calentamiento global en comparación con el dióxido de carbono cuando se mide en términos de potencialidad. Según Zero Waste America, solo se reciclan 14% de plásticos, mientras que el resto termina en vertederos o en la basura, lo que contamina más y plantea desafíos para la gestión de la eliminación de residuos.
Waste Management Inc. sugiere diferentes métodos, como el reciclaje, el compostaje y los programas de conversión de residuos en energía, como formas de reducir la cantidad de basura que se lleva a los vertederos. Será posible reducir la cantidad de basura que se arroja a estas instalaciones si aumentamos las tasas de reutilización de los materiales mediante métodos de mejores prácticas, además de encontrar otros medios para utilizar la basura en lugar de enterrarla bajo tierra, minimizando así los impactos ambientales resultantes.
¿Es el plástico PET más reciclable que el vidrio?
Procesos de reciclaje: Botellas de plástico PET en comparación con el vidrio
El reciclaje de botellas de plástico PET y de vidrio se diferencia en cuanto a las características de sus materiales y las fases de reciclaje. Las botellas de PET, que se producen principalmente con la ayuda de tereftalato de polietileno, se recogen, se clasifican y se limpian. A continuación, se cortan en trozos pequeños y se lavan de nuevo para eliminar la suciedad o los productos químicos restantes. Estos copos limpios se pueden utilizar para producir pellets, que a su vez se utilizarán para la fabricación de nuevos productos de plástico o incluso para la fabricación de nuevas botellas.
Otro proceso consiste en la recogida y clasificación de los vidrios por color antes de limpiarlos para eliminar impurezas y otros materiales no deseados que puedan contaminarlos durante el reciclaje. A continuación, se trituran en pequeños trozos llamados vidrio triturado, que se funden junto con otros tipos de cristalería, como ventanas o vasos, dentro de un horno antes de darles otra forma, como jarrones o jarras, entre otros. Sin embargo, a diferencia de los plásticos PET, que tienden a perder su calidad después de varios reciclados, el vidrio puede reciclarse de nuevo sin que se deteriore su calidad.
En resumen, ambos materiales pueden reciclarse, pero el vidrio tiene una ventaja sobre los plásticos PET porque puede reutilizarse muchas veces sin degradarse; por otro lado, este tipo de plástico tiene más usos, aunque con el tiempo puede ser necesario convertirlo en productos de menor calidad si no se gestiona adecuadamente. Las sutiles variaciones entre estos dos señalan una mejora de la eficiencia dentro de sus respectivos procesos de reciclaje encaminados a lograr resultados sostenibles.
Requisitos energéticos para reciclar envases de PET frente a envases de vidrio
La energía necesaria para reciclar los envases de plástico PET y de vidrio puede variar considerablemente, y el vidrio consume más energía que los plásticos PET. Según la información más reciente de las principales fuentes, se necesitan entre 1,9 y 2,3 megajulios (MJ) por kilogramo para reciclar los plásticos PET. Las actividades implicadas en este proceso incluyen la recolección, la clasificación, el lavado, la trituración y la fundición de los envases para fabricar nuevos productos a partir de este material.
Por el contrario, reciclar botellas de vidrio requiere mucha energía. Todo el proceso, desde la recolección y la limpieza hasta el triturado y la refundición del vidrio, requiere alrededor de 4-6 MJ por kilogramo de energía consumida durante esta etapa solamente. Esto se debe principalmente a las altas temperaturas que se deben alcanzar y mantener durante todo el proceso para fundir el vidrio, por lo que uno podría preguntarse por qué se necesita tanto calor.
Estas distinciones muestran que reciclar plástico PET ahorra más energía que reciclar vidrio; sin embargo, debe haber un equilibrio entre estos dos puntos, teniendo en cuenta la preservación de la calidad, los efectos ambientales y otros factores asociados con sus respectivos métodos de reciclaje.
¿Qué es más seguro para las bebidas: vidrio o plástico?
Riesgos de lixiviación: botellas de plástico frente a botellas de vidrio
La lixiviación es un factor clave que se debe tener en cuenta al evaluar la seguridad de los envases de bebidas. Por ejemplo, las botellas de plástico fabricadas con PET han sido objeto de escrutinio porque pueden liberar sustancias químicas en su contenido. Algunos materiales, como el antimonio y los ftalatos, pueden liberarse de los plásticos cuando entran en contacto con altas temperaturas o se utilizan repetidamente a lo largo del tiempo; se sabe que estas sustancias suponen riesgos para la salud.
Por otro lado, se cree que las botellas de vidrio son menos propensas a la lixiviación. El vidrio es una sustancia no reactiva que no interactúa químicamente con su entorno, como las bebidas, incluso si se expone a diferentes grados de calor o tiempo durante el almacenamiento. Esta cualidad hace que el vidrio sea la mejor opción para las personas que desean que sus bebidas sean puras y seguras durante todo el período en que permanezcan selladas.
En términos generales, aunque las botellas de plástico ofrecen facilidad de uso y beneficios de reciclaje con menor consumo de energía para la conservación del medio ambiente, los estándares de seguridad de lixiviación química se cumplen más con las opciones de botellas de vidrio que, por lo tanto, deberían ser las preferidas entre los compradores preocupados por la salud.
Impacto en la calidad de las bebidas: carbonatación y sabor
Al evaluar cómo el material del envase afecta la calidad de las bebidas, hay dos aspectos principales que se deben tener en cuenta: la retención de la carbonatación y la conservación del sabor. La capacidad de las botellas de vidrio para retener el dióxido de carbono y evitar que se introduzcan olores o sabores extraños en la bebida es bien conocida. Las bebidas carbonatadas conservan su efervescencia durante más tiempo porque el vidrio es impermeable a ellas. Además, el vidrio no reacciona químicamente con la bebida, por lo que conserva su sabor y calidad previstos.
Por el contrario, las botellas de plástico fabricadas con PET tienen niveles más altos de permeabilidad a los gases, lo que hace que pierdan su efervescencia lentamente con el tiempo. Este tipo de material también puede absorber o liberar olores y sabores externos, modificando así el perfil de sabor inicial de una bebida. Sin embargo, aunque algunos avances en la tecnología de los plásticos han solucionado estos problemas, nada supera a un sello hermético, como el que obtenemos al usar envases de vidrio si queremos que nuestros refrescos burbujeen durante más horas. Por esta razón, entre otras, cuando se debe conservar el sabor y mantener intacto el CO2 durante el almacenamiento, las botellas de vidrio siempre ganan, ya que son las que mejor preservan la carbonatación.
¿Cuáles son las evaluaciones del ciclo de vida (LCA) para botellas de PET frente a botellas de vidrio?
Impactos ambientales a lo largo del ciclo de vida
Al comparar los impactos ambientales de las botellas de PET y de vidrio a lo largo de sus ciclos de vida, debemos considerar muchos factores: extracción de materias primas, proceso de fabricación, transporte y eliminación o reciclaje al final de su vida útil.
- Extracción y fabricación de materia prima: Para producir un producto plástico final, se extraen materiales derivados del petróleo al fabricar botellas de PET, después de lo cual se someten a métodos que requieren mucho energía, a diferencia de la producción de botellas de vidrio que necesita arena, carbonato de sodio, piedra caliza, entre otros, igualmente tratados a alta temperatura para fundirlos en contenedores.
- Transporte: Un beneficio que viene con el uso de estos contenedores más livianos es que durante el transporte se utiliza menos combustible, lo que genera menores emisiones en comparación con sus contrapartes de vidrio más pesados que requieren más combustible por viaje.
- Eliminación y reciclaje al final de su vida útil: ambos tipos se pueden reciclar, pero con diferentes niveles de eficiencia. Si bien la mayoría de las veces el reciclaje reduce la calidad del material, las botellas de PET se pueden volver a utilizar en otras formas hechas con el mismo plástico, mientras que, por otro lado, no hay límite para la cantidad de veces que una sola botella se puede reprocesar en otra sin perder calidad; por lo tanto, se perfecciona la conservación, aunque consume más energía que su contraparte.
En resumen, cada uno de estos elementos tiene beneficios para el medio ambiente en diferentes etapas de su vida útil; la ligereza reduce las tasas de emisión durante el movimiento, pero también hace que sea más fácil reciclarlos una vez que han cumplido su propósito, aunque generalmente se obtienen productos menos valiosos a través de dichos procesos, por lo que se consideran ineficientes en la escala de reciclabilidad en comparación con los de vidrio más pesados.
Comparación de los resultados del ACV: Huella de carbono y generación de residuos
Huella de carbono
Si comparamos la huella de carbono de las botellas de vidrio y de PET, queda claro que, en general, la huella de carbono de las botellas de PET es menor a lo largo de su vida útil. Esto se debe principalmente a que el PET es más ligero que el vidrio, lo que hace que las emisiones del transporte se reduzcan considerablemente. Algunas investigaciones demuestran que la fabricación de botellas de PET requiere menos energía durante su fase de producción que la fabricación de botellas de vidrio, que necesitan altas temperaturas para fundirlas y moldearlas. Además, aunque el vidrio se puede reciclar indefinidamente sin perder calidad, reciclarlo requiere más energía que reciclar PET, lo que aumenta aún más la huella de carbono.
Generación de residuos
Otro aspecto clave que se tiene en cuenta en el análisis del ACV es la generación de residuos. En ocasiones, los productos fabricados con PET reciclado pueden ser de menor calidad, por lo que se reciclan a la baja, lo que a la larga acaba siendo desechado como residuo a pesar de ser reciclables. Por otro lado, una botella de vidrio se puede utilizar repetidamente sin comprometer su estado original gracias a la buena reciclabilidad que ofrecen este tipo de envases, pero el mayor consumo de energía necesario para el proceso de reciclaje podría afectar a la eficiencia general en la gestión de residuos. En resumen, aunque la reducción de las emisiones de la producción y el transporte hace que las botellas de plástico estén en mejor situación en lo que respecta a su impacto medioambiental (huella de carbono), el vaso de papel tiene ventaja sobre los vasos de plástico en lo que respecta a lo que ocurre después del uso, ya que los vasos reutilizados reducen la utilización del espacio en los vertederos, lo que a su vez conduce a...
¿Cuáles son las preferencias de la industria y del consumidor?
Tendencias del mercado: vidrio y aluminio versus plástico
En los últimos años, las tendencias de la industria y las preferencias de los consumidores han mostrado una marcada tendencia hacia envases más ecológicos. Los beneficios ambientales y la reciclabilidad son dos razones por las que el vidrio y el aluminio están tomando precedencia sobre el plástico.
- Sostenibilidad y reciclabilidad: La razón principal de este cambio parece radicar en el hecho de que el vidrio y el aluminio se pueden reciclar más veces que los plásticos. Mientras que el vidrio se puede reciclar infinitamente sin comprometer la calidad, el reciclaje del aluminio es muy eficiente y ahorra energía. Por el contrario, el reciclaje de plástico a menudo da como resultado productos infrarreciclados que, a la larga, generan residuos.
- Preocupaciones en materia de salud y seguridad: La conciencia de los consumidores sobre los posibles riesgos para la salud asociados con los envases de plástico ha aumentado de forma constante, incluida la filtración de sustancias químicas nocivas en los alimentos o bebidas que contienen. Por lo tanto, la inercia química de estos materiales, como el vidrio o el aluminio, los hace percibirse como opciones más seguras, ya que no plantean tales problemas, además de preservar la salubridad del contenido.
- Demanda del mercado y posicionamiento de marca: Un número cada vez mayor de empresas ahora están alineando el posicionamiento de su marca con los valores de sustentabilidad, mientras que algunas marcas de lujo de alta gama también adoptan empaques ecológicos hechos de latas de aluminio o frascos/botellas de vidrio de silicato de cal sódica para atraer a clientes amigables con el medio ambiente que prefieren soluciones de empaque ecológico en unidades de procesamiento de productos de belleza (cosméticos), alimentos, etc., donde la apariencia es lo más importante junto con los informes de evaluación de impacto ambiental que se consideran durante las etapas de toma de decisiones.
En resumen, lo que hemos visto hasta ahora es solo otra indicación de que las personas quieren productos seguros y sostenibles, por lo que siempre deberían elegir aquellos que estén bien envueltos usando latas o contenedores de metal en lugar de bolsas de polietileno.
Percepciones del consumidor: envases de bebidas de plástico frente a envases de vidrio
La percepción de los consumidores sobre si una bebida debe almacenarse en un recipiente de plástico o de vidrio se ve afectada por diferentes factores, como los efectos medioambientales, los problemas de salud y la experiencia del consumidor en general. El vidrio suele considerarse más ecológico en comparación con otras alternativas porque se puede reciclar infinitamente y tiene menos posibilidades de acabar en vertederos, según muchas fuentes. Las personas también temen mucho por su bienestar; por lo tanto, les gustaría que los recipientes estuvieran hechos de vidrio para no estar expuestos a sustancias químicas como el BPA o los ftalatos, que podrían filtrarse en los alimentos o las bebidas a través de los plásticos y contaminarlos. Además, el disfrute general de las bebidas por parte del cliente mejora cuando se sirven en vasos debido a que siempre se han asociado con productos de alta calidad, además de mantener el sabor fresco durante más tiempo que cualquier otro material utilizado para envasar líquidos, como botellas de refrescos, etc. Esta percepción empuja tanto a los clientes como a las empresas a utilizar solo este tipo de envoltorios.
Preguntas frecuentes (FAQ)
P: ¿Cuáles son las principales disparidades entre las botellas de vidrio y las botellas de PET?
R: Las botellas de vidrio se fabrican a partir de vidrio, mientras que el tereftalato de polietileno se utiliza para fabricar botellas de PET. Son ligeras, difíciles de romper y más económicas en la mayoría de los casos, en comparación con sus homólogas, que pueden reciclarse o reutilizarse más fácilmente varias veces y, a menudo, aportan a las bebidas un toque lujoso.
P: ¿Es cierto que la botella de PET es más ecológica que su variante de vidrio?
R: Se dice que, en comparación con la producción y el transporte de estos últimos, se consume menos energía y se generan menos residuos sólidos al aligerar los envases de PET, lo que los hace más fáciles de reciclar, según la NAPCOR (Asociación Nacional de Recursos para Envases de PET). Pero, en períodos más largos, se debería preferir su reutilización o reciclaje, ya que pueden cumplir mejor este propósito.
P: ¿El proceso de fabricación de una botella de vidrio requiere más agua que el de su equivalente de plástico?
R: Sí, normalmente durante su producción el consumo de agua es menor en el caso de las botellas de PET que en el de las de vidrio. La fabricación de envases plásticos a partir de tereftalato de polietileno implica habitualmente una mayor eficiencia en cuanto a este recurso.
P: ¿Son las botellas de plástico peores que las de vidrio cuando se trata de bebidas?
R: En comparación con plásticos como el PET, el uso del vidrio tiene algunas ventajas, como que conserva mejor el sabor y la calidad, pero también es respetuoso con el medio ambiente al reutilizarlo. Por otro lado, no se pueden ignorar los beneficios que ofrecen la ligereza o la resistencia a la rotura que presentan algunos tipos de estos materiales.
P: ¿Cómo se comparan las latas de aluminio con las botellas de plástico/vidrio en la selección de materiales para envasado de bebidas?
R: Al igual que los envases de PET, las latas de aluminio son livianas, totalmente reciclables y brindan una excelente protección para las bebidas. Si consideramos la comodidad durante el transporte, se combinan con frascos de vidrio que consumen menos energía durante el reciclaje; entonces, se podría decir que el aluminio se acerca mucho más como solución ideal.
P: ¿Qué papel desempeña NAPCOR?
R: NAPCOR es una organización que trabaja para promover el uso de botellas y envases de plástico PET. Comparten conocimientos sobre el reciclaje y los efectos ambientales relacionados con los materiales de embalaje de PET.
P: ¿Es cierto que las botellas de PET son más rentables para envasar bebidas que las botellas de vidrio?
R: Sí, en general es cierto que las botellas de PET son más económicas cuando se utilizan como envases de bebidas en comparación con las de vidrio. Esto se debe a que consumen menos energía durante los procesos de producción y transporte y son menos propensas a sufrir daños, lo que puede reducir los costos generales.
P: ¿Son fáciles de reciclar las botellas de tereftalato de polietileno (PET)?
R: ¡Por supuesto! Las botellas de agua usadas fabricadas con este material son ampliamente recolectadas por recicladores que las transforman en diferentes artículos, como chaquetas u otras jarras de plástico, así como en nuevos envases para bebidas, entre otros. Su alto nivel de reutilización las ha hecho muy populares para su uso en el envasado de bebidas.
P: ¿Cómo se comparan las botellas de acero inoxidable con las de vidrio y plástico?
R: Las botellas de acero inoxidable se pueden reutilizar una y otra vez, al igual que sus homólogas de plástico o vidrio, pero a diferencia de estos dos tipos, no liberan ninguna sustancia química en el contenido. Además, este tipo de botellas mantienen calientes los líquidos calientes y frías las bebidas frías durante largos períodos de tiempo, aunque inicialmente el acero inoxidable puede costar más que las botellas de plástico PET y de vidrio.
P: ¿Por qué la gente podría elegir el vidrio en lugar del PET?
R: Los frascos de vidrio tienen muchas ventajas sobre los fabricados con tereftalato de polietileno; en primer lugar, se consideran ecológicos debido a su naturaleza no tóxica y, al mismo tiempo, conservan la frescura durante más tiempo que cualquier otro material disponible actualmente en el mercado. En segundo lugar, se pueden reutilizar innumerables veces sin comprometer la calidad, incluso después de fundirse durante el proceso de reciclaje, lo que los hace ideales para contenedores de almacenamiento.